Remedios Naturales para las Varices
Remedios naturales para las varices y mejorar la circulación
Las paredes de las venas dañadas obstaculizan el sistema circulatorio, lo que permite que la sangre se acumule y fluya de manera retrógrada (hacia atrás) cuando los músculos se relajan. Esto crea una acumulación inusualmente alta de presión en las venas. Esta acumulación provoca un mayor estiramiento y torsión de las venas, aumento de la hinchazón, más incompetencia de las válvulas, flujo sanguíneo lento y posible formación de coágulos de sangre. Eventualmente, esta condición puede conducir a varios trastornos conocidos como enfermedad venosa.
La enfermedad venosa es bastante común. Aproximadamente el 15 por ciento de la población de los Estados Unidos se ve afectada por venas varicosas, que generalmente no representan un gran riesgo para la salud. Sin embargo, la tromboflebitis puede ser mucho más grave, incluso potencialmente mortal, y afecta a millones de personas cada año.
Remedios naturales para las varices y mejorar la circulación
Las Varices
Las varices, también conocidas como venas varicosas o insuficiencia venosa crónica, son venas dilatadas y retorcidas que se desarrollan principalmente en las piernas. Se producen cuando las válvulas venosas que ayudan a que la sangre fluya en dirección ascendente desde las piernas hacia el corazón no funcionan correctamente.
Las venas varicosas son causadas por una debilidad en las paredes de las venas y un mal funcionamiento de las válvulas venosas. Esto provoca que la sangre se acumule y se estanque en las venas, lo que conduce a su dilatación y a la aparición de las varices.
Existen varios factores que pueden aumentar el riesgo de desarrollar varices, como la predisposición genética, el género (las mujeres tienen más probabilidades de padecerlas), el embarazo, la obesidad, el sedentarismo, la edad avanzada y estar de pie o sentado durante largos períodos de tiempo.
Los síntomas comunes de las varices incluyen venas visiblemente dilatadas y retorcidas, dolor, pesadez, sensación de ardor, picazón, hinchazón y calambres en las piernas. En algunos casos, las varices pueden provocar complicaciones como úlceras en la piel, inflamación de las venas superficiales (trombosis venosa superficial) o formación de coágulos sanguíneos en las venas profundas (trombosis venosa profunda).
El tratamiento de las varices puede variar según la gravedad de los síntomas. Las medidas conservadoras suelen ser el primer enfoque e incluyen el uso de medias de compresión, el ejercicio regular, el levantamiento de piernas, la pérdida de peso y evitar estar de pie o sentado durante largos períodos de tiempo.
En casos más graves o cuando los síntomas son muy molestos, se pueden considerar tratamientos médicos o quirúrgicos, como la escleroterapia (inyección de una solución en las venas para cerrarlas), la ablación con láser (uso de energía láser para sellar las venas), la flebectomía (extracción quirúrgica de las venas varicosas) o la cirugía de ligadura y extracción (ligar y extirpar las venas afectadas). Sin embargo, antes de buscar soluciones extremas e invasivas, lo mejor es trabajar con un profesional holistico, para hacer cambios en el Estilo de Vida y poner en practica medidas preventivas.
Factores de riesgos
Existen varios factores de riesgo asociados al desarrollo de varices. Algunos de los factores más comunes son:
Predisposición genética: Tener antecedentes familiares de varices aumenta la probabilidad de padecerlas, ya que hay una predisposición hereditaria a tener venas y válvulas venosas más débiles.
Género: Las mujeres tienen mayor probabilidad de desarrollar varices que los hombres. Esto se debe a cambios hormonales durante el embarazo, la menopausia y el uso de terapia hormonal, que pueden debilitar las venas.
Edad: El riesgo de varices aumenta con la edad. A medida que envejecemos, nuestras venas tienden a perder elasticidad y las válvulas venosas pueden debilitarse, lo que favorece la aparición de varices.
Embarazo: Durante el embarazo, aumenta la cantidad de sangre circulante en el cuerpo y se producen cambios hormonales que pueden debilitar las paredes de las venas y las válvulas. Esto puede provocar la aparición de varices en las piernas.
Obesidad: El exceso de peso ejerce una presión adicional sobre las venas de las piernas, lo que dificulta el retorno venoso adecuado y aumenta el riesgo de desarrollar varices.
Estilo de vida sedentario: Permanecer sentado o de pie durante largos períodos de tiempo sin moverse adecuadamente puede dificultar la circulación sanguínea en las piernas y aumentar el riesgo de varices.
Traumatismos o cirugías en las piernas: Lesiones o cirugías en las piernas pueden dañar las venas y afectar el flujo sanguíneo, lo que puede contribuir al desarrollo de varices.
Es importante tener en cuenta que estos factores de riesgo no garantizan que una persona desarrolle varices, pero sí aumentan las probabilidades. Adoptar hábitos de vida saludables, como mantener un peso adecuado, realizar ejercicio regularmente, evitar el sedentarismo, elevar las piernas y usar medias de compresión, puede ayudar a reducir el riesgo de varices o aliviar sus síntomas en caso de que ya estén presentes.
Las frutas que ayuda a eliminar las varices y mejora la circulación
No existe una fruta específica que pueda eliminar las varices por completo o curar la insuficiencia venosa crónica. Sin embargo, algunas frutas pueden ser beneficiosas para mejorar la circulación y promover la salud vascular en general. Estas frutas contienen nutrientes y compuestos que pueden ayudar a fortalecer las paredes de los vasos sanguíneos y mejorar la circulación. Algunas opciones incluyen:
Cítricos: Los cítricos como naranjas, limones, pomelos y mandarinas son ricos en vitamina C y bioflavonoides, que ayudan a fortalecer los vasos sanguíneos y promover una mejor circulación.
Bayas: Las bayas, como las fresas, los arándanos y las frambuesas, son ricas en antioxidantes y compuestos antiinflamatorios que pueden ayudar a mejorar la salud vascular.
Uvas: Las uvas, especialmente las uvas rojas y moradas, contienen antioxidantes, como los flavonoides y el resveratrol, que pueden ayudar a fortalecer los vasos sanguíneos y mejorar la circulación.
Piñas: La piña contiene bromelina, una enzima que puede tener propiedades antiinflamatorias y mejorar la circulación.
Kiwis: Los kiwis son ricos en vitamina C, que es esencial para la producción de colágeno y la salud de los vasos sanguíneos.
Es importante tener en cuenta que el consumo de estas frutas, si bien puede ser beneficioso para la salud vascular en general, no reemplaza otros enfoques de tratamiento para las varices.
Grosellero negro para mejorar la varices y la circulación
El grosellero negro, también conocido como grosella negra, es una fruta que se ha utilizado en la medicina tradicional para tratar una variedad de condiciones de salud.
El grosellero negro es rico en vitamina C y antioxidantes, y puede tener propiedades antiinflamatorias y mejorar la salud vascular en general. Estos beneficios pueden contribuir a la circulación sanguínea y la salud de los vasos.
Remedios caseros para las varices como infusión de corteza de sauce
La corteza de sauce contiene un compuesto llamado salicina, que es un precursor de la aspirina y puede tener propiedades antiinflamatorias y analgésicas. Algunas personas han utilizado infusiones de corteza de sauce como remedio casero para las varices. Sin embargo, es importante destacar que no hay suficiente evidencia científica que respalde su eficacia específica en el tratamiento de las varices.
Si deseas probar remedios caseros para aliviar los síntomas de las varices, aquí hay algunas opciones que podrías considerar:
Compresas frías: Aplica compresas frías en las áreas afectadas para ayudar a reducir la inflamación y aliviar la sensación de pesadez y malestar.
Elevación de piernas: Coloca las piernas en alto para favorecer el flujo sanguíneo hacia el corazón y reducir la acumulación de sangre en las venas.
Ejercicio regular: Realiza actividades físicas de bajo impacto, como caminar o nadar, para estimular la circulación sanguínea y fortalecer los músculos de las piernas.
Medias de compresión: Utiliza medias de compresión graduada, que pueden ayudar a mejorar el flujo sanguíneo y aliviar los síntomas de las varices.
Dieta saludable: Mantén una alimentación equilibrada, rica en frutas, verduras y fibras, para mantener un peso adecuado y promover una buena salud vascular.
Siempre es recomendable buscar ayuda profesional
Infusión de corteza de sauce
1 cucharadita de corteza de sauce (5 g)
1 vaso de agua (250 ml)
Preparación
Verter la cucharadita de corteza en agua hirbiendo, apagar y dejar reposando 10 0 15 minutos
Consumir una vez al dia, dos o tres veces por semana
Infusion de jenjibre
Ingredientes
1 cucharada de raiz de jenjibre rallada (10 g)
1 vaso de agua (250 ml)
Preparación
Colocar el agua a herbir
Limpiar y rallar el jenjibre
Al empezar a herbir añadir el jenjibre
Dejar reposar el agua durante 10 minutos con tapa y luego beber